En el proceso de
dejarlo, de mi vida arrancarlo, vuelve a pedir perdón. ¿Cómo puede ser tan bello y a la vez envenenarme con su dosis de hiel?
Atiéndeme, quiero decirte algo que quizá no esperes, doloroso tal vez. Escúchame que aunque me duela en el alma yo necesito hablarte y así lo haré. Nosotros que fuimos tan sinceros, que desde que nos vimos queriéndonos estamos. Nosotros que el amor hicimos, un sol maravilloso, un romance tan divino. Nosotros que nos queremos tanto debemos separarnos. No preguntes más, no es falta de cariño, te quiero con el alma, te juro que te adoro. Y en el nombre de este amor y por tu bien, te digo adiós.
Si tú te atreves por mi vida que te sigo, si tú me olvidas te prometo que te olvido. Después de todo sólo queda un sueño roto y evitamos mil heridas que jamás podrían cerrar. Si tú te atreves yo renuncio al paraíso, amar contigo, a soñarte a que me sueñes. Y al fin y al cabo más que a nadie nos queremos, son pasiones ya tan fuertes que lo nuestro hay que olvidarlo.
Te digo adiós y acaso te quiero todavía, quizás no he de olvidarte, quizás no te quería o tal vez nos quisimos demasiado los dos. Este cariño triste, apasionado y loco me lo sembré en el alma para quererte a ti. No sé si te amé mucho, no sé si te amé poco, pero sí sé que jamás volveré a amar así. Me llevo tu sonrisa dormida en mis recuerdos y el corazón me dice que no te olvidaré, pero al sentirme sóla sabiendo que te pierdo tal vez empiezo a amarte como jamás te amé. Te digo adiós y acaso con esta despedida mi más hermoso sueño muere dentro de mí. Pero te digo adiós para toda la vida, aunque toda la vida siga pensando en tí.
Hoy ya no quiero verte conmigo, no sabes cuánto sufro cariño. No sé si soy feliz lejos de ti, no soy feliz estando contigo. Un día me amas, luego me olvidas. Un día me amas, luego me olvidas. No sé si soy feliz lejos de ti, no soy feliz estando contigo. Vienes, vienes y te vas. Vienes, vienes y te vas. Vienes, vienes y te vas.