11 de enero de 2010

Tú llegaste a mi vida para enseñarme, tú supiste encenderme y luego apagarme, tú te hiciste indispensable para mí. Y con los ojos cerrados te seguí, si yo busqué dolor lo conseguí, no eres la persona que pensé, que creí, que pedí. Mientes, me haces daño y luego te arrepientes, ya no tiene caso que lo intentes, no me quedan ganas de sentir. Llegas cuando estoy a punto de olvidarte, busca tu camino en otra parte, mientras busco el tiempo que perdí. Y hoy estoy mejor sin ti. Voy de nuevo recordando lo que soy, sabiendo lo que dás y lo que doy. En mí no queda espacio para tí. Y el tiempo hizo lo suyo y comprendí las cosas no suceden porque sí, no eres la persona que pensé, que creí, que pedí. Mientes, me haces daño y luego te arrepientes ya no tiene caso que lo intentes, no me quedan ganas de sentir. Llegas cuando estoy a punto de olvidarte, busca tu camino en otra parte, mientras busco el tiempo que perdí. Y hoy estoy mejor sin ti, hoy estoy mejor sin ti. Llegas cuando estoy a punto de olvidarte, busca tu camino en otra parte, mientras busco el tiempo que perdí y hoy estoy mejor sin ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tiene veinte enemigas, dos amigas