Me resulta imposible sacarlo de mi cabeza. Un camino de ida y vuelta que termina en la cerveza, en la cerveza. Pero que nunca aterrizan, metáforas como cuentos sin moralejas. Del quinto piso está chistándome una vieja, que como yo, ya se olvidó de las sonrisas. Un verso triste que me acaban de vender, y los zapatos que me aprietan el talón. Disculpen que sea tan triste mi canción, es que no lo volveré a ver.
Y tengo miedo a equivocarme, a sufrir ser lastimada. Equivocarse es algo humano, pero amarte es un pecado, es un pecado. Y ruego a Dios que esto termine, para poder ser la de antes, que no llora por hombres y tiene siempre un amante, siempre un amante. Porque conozco yo el calibre de tus besos, ya no me dejo asesinar por esa boca. No pongo un pero más por vos, no tengo un peso. Mejor le cedo a otra el turno que me toca, que me toca.

Dijiste que jamás me ibas a mentir, y pase lo que pase estarías aquí junto a mí, para siempre. Dijiste que jamás me ibas a dejar, que siempre a mi lado ibas a estar, junto a mi para siempre. Si me quieres dejar es por otra razón, no digas que el problema fue traición. Te lloro en la cara y no te importa nada, te lloro en la cara escuchá mis palabras. No me puedes dejar, sólo díme la verdad, que no me amas.

Es por todo esto que entiendo que no hay que tratar con prioridad a quién te trata como opción. Porque en este tiempo fue tan fácil verlo, sólo que yo no lo quería ver. Y ahora noto que ni por opción él me tiene, me tiene como si fuera un vino y fue, sólo como eso. Sólo como alguien que decidió pasar por su vida, marcarla e irse por la puerta que entró. Pero para ese alguien no fue así, y sé que para tí hace tiempo tampoco lo fue. Yo sé que te morías de amor, y la traición que hubo te hizo desear dejar de querer, dejar de desmoronarte cuando me veías, yo sé que te partió el alma lo que hice, sólo que lo pensaste, nunca supiste la verdad y nunca te la dije, te mentí, es verdad te mentí, para bien de los dos, sólo que no salió como pensé que saldría. No puede ser que así como si nada ese amor que dentro tuyo crecía se desvaneciera como por arte de magia, así sólo así, como por arte de magia se fue todo el amor, me dejaste de querer, te fuiste tú junto a mi felicidad. Del dolor sólo algo bueno puedo separar, que sólo por él sé que exististe, sólo por él sé que estuviste presente en mi vida, sólo por él sé que te besé, que te acaricié, que me quisiste, sólo el dolor hace que sepa que vos fuiste el amor de mi vida. El amor se fue, ya no volverá. Ojalá lo pienses, nunca te dejaré de amar. Es sólo que lo tengo que ocultar, tengo que ocultar que muero por dentro cuando te veo con otra mujer, con otra amante. Tengo que ocultar que me muero de amor por vos, que te veo y siento maripocitas recorrer mi panza, tengo que ocultar que el dolor me mata, que no puedo estar sin vos, que no sé cómo seguir. Tengo que ocultar el simple hecho de que te amo más que a nada en el mundo, tengo que ocultar las ganas de abrazarte, de poseerte. Tengo que aguantarme las ganas de ir a decirte que nunca te pude olvidar, que te necesité, que lloré por verte, por tocarte, que necesité tu piel rosando la mía, que necesité tus besos que eran como heroína, que necesité tus labios chocando con los míos, conociendo lo desconocido, que te necesité sólo eso. Que tengo que aguantarme las ganas de decirte que no puedo más sin vos, que te extraño a mi lado, que quiero que volvamos el tiempo atrás, recordando cuando eramos felices JUNTOS, no separados. Me tengo que aguantar las ganas de decirte: "PERDÓN", de decirte que lamento haber sido la peor, que lamento haberte hecho tanto mal, que necesito que me mires a la cara y me digas que me amas. Me tengo que aguantar las ganas de mirarte a los ojos, de decirte que te quiero a mi lado para siempre y que no nos separemos nunca jamás. Tengo que aguantarme las ganas de besarte. TENGO QUE AGUANTARME LAS GANAS DE AMARTE. Pero tengo que olvidarte, tengo que creer que no sos el único que hay otras personas por conocerte, pero nadie hace que te olvide, nadie hace que te saque de mi mente, no por siempre. Nadie va a hacer que deje de quererte, que te deje de soñar, de amar. Nadie va a hacer que olvide que fuiste MÍO. Nadie va a hacer que deje de pensar que fuiste lo mejor que me pasó en la vida. Nadie va a hacer que deje de creer que sos el hombre perfecto, que sos único. Nadie va a hacer que crea que necesito a otro, nadie va a hacer que deje de pensar que mi futuro está con vos, a tu lado y sólo ahí. Nadie va a hacer que deje de pensar que sos vos y sólo vos el dueño de mi vida, de mi corazón. Nadie va a ocupar tu lugar, jamás. Nadie va a tener el honor de ser amado de la forma en la cuál te amo. Nadie va a poder ser querido como te quiero, nadie, no a mi lado. Pobre el que quiera ocupar tu lugar, pobre aquel que quiera osar de este ser casi impenetrable. Pobre el que crea que lo voy a amar como te amo, pobre el que crea que hace que te olvide. Pobre el que piense que va a poder ser algún día lo que fuiste vos en mi vida, pobre aquel que crea que me va a poder enamorar.

Lo extraño, es sólo eso. Es sólo que aunque sé que no es para mí, siento que no es así. Es sólo que pienso que lo necesito, aunque sé que no. Es sólo que creo que puede cambiar mi vida, aunque no es así. No sé por qué me siento tan atada a él, por qué cuando lo veo en línea mi corazón comienza a latir cada vez más fuerte, por qué cuando lo veo siento maripocitas recorrer mi panza. Es sólo que, creí que era diferente y no lo es. Creí que podía marcar la diferencia, pero no lo hace. Creía que podía ser el hombre de mi vida, y sólo es un niño. No es lo que yo necesito para vivir. A veces siento que sólo por él soy feliz, cuando me habla que siento que toco las nubes, es mentira estoy muy lejos de hacerlo. Es sólo que mi mente piensa cosas que no son, es sólo que no vé la realidad, es sólo eso. Es sólo que creí que enamorarme de él iba a ser buena idea, también teniendo en mente que no lo era. Es sólo que pensé que de verdad me podía querer, sólo que nadie lo pudo hacer como lo hacía aquel hombre que amé. Es sólo que busqué rápido un reemplazo de aquel hombre, y pensé que lo había encontrado pero no fue así. Es sólo que lo quise, pero él no a mí.

No lo niego, aún me duele. Duele ver la realidad y yo la estoy viendo. No sabés cómo duele sentirte tan lejos mientras te tengo tan cerca. No sabés cómo duele saber que no sos mío y que nunca lo serás. No sabés cómo duele creer que me podés llegar a querer devuelta teniendo en la mente que es imposible. No sabés cómo duele extrañarte, necesitarte. Duele, el sólo hecho de amarte duele. No sé qué dolió más, si ESE adiós o si fue el reencuentro y verte estando feliz con otras mientras que yo lloraba por tí. No sé por qué tan tarde me resigné a vos, no sé por qué te comencé a querer cuando todo se terminó. No es fácil saber que ya nunca será como era antes, que ya no te tendré a mi lado. Tal vez si, pero no como yo quiero, no abrazándome ni dándome besos, ni me dirás más te quiero, ni te amos, ni me tendrás caminando de la mano. No te tengo que querer más, siempre me juro que es la última vez, ni la tercer fue la vencida. Te quiero y creo que te voy a querer para toda la vida.

Me volví a acordar de tí querido. Parece que no te olvidé todavía. Recordé aquellas horas, los besos que dejé en tú boca y al amor te entregabas todo. Y tú te fuiste, yo hice mi vida. Desde ese día no supe más de tí. Pero de golpe, indiscretamente tú recuerdo se apoderó de mí. Y me volví a acordar de tí y me volví a enamorar. Otra vez, inesperadamente. Y me volví a acordar de tí y me volví a enamorar. Otra vez, desesperadamente. Honestamente parece mentira volver a recordar de tí todavía. Esas noches que te amaba, tu seductora timidéz. Te regalabas a la luna, amándome. Y tú te fuiste yo hice mi vida, desde ese día no supe más de tí.